La metodología BIM se utiliza cada vez más en el sector salud. BIM se puede usar para lograr una serie de beneficios, que incluyen mejores resultados para los pacientes, contención de costes y eficiencia mejorada.
Puede ayudar a garantizar que los edificios se diseñen y construyan de manera óptima para la atención de los pacientes. Por ejemplo, con esta forma de trabajar se puede utilizar para garantizar que las habitaciones del hospital tengan el tamaño y la distribución correctos para satisfacer las necesidades de los pacientes. BIM también se puede utilizar para ayudar a planificar el flujo de pacientes a través de un hospital, de modo que puedan ser atendidos por el personal correcto en el momento correcto.